Una barrera rota, un sueño hecho realidad. Eliud Kipchoge hace historia al correr una maratón en menos de 2 horas en el histórico desafío Ineos 1:59 en Viena.
Cuando Eliud Kipchoge de Kenia rompió la cinta en Viena, 1 hora 59 minutos y 40 segundos después de haber comenzado, algo cambió para siempre en las maratones. Una barrera rota, un sueño hecho realidad.
Kipchoge, el mejor corredor de maratón de la historia.
El keniano, que ha ganado 12 de los 13 maratones en los que ha participado, ha estado obsesionado con la barrera de sub-2 durante años. Y no olvidemos lo cerca que estuvo en su primer intento, en mayo de 2017 en Monza, cuando corrió en 2:00:25.
El entrenamiento ha sido implacable. Doscientos veinticinco kilómetros a la semana. Castigadoras sesiones de velocidad. Entrenamiento de fuerza. Sin embargo, tal vez fue la fuerza mental de Kipchoge, más que su extraordinaria aptitud física lo que resultó decisivo en Viena. «Algunas personas creen que es imposible», dijo antes del evento. «Respeto sus puntos de vista; deberían respetar el mío. Mi equipo y yo creemos que es posible: les demostraremos que están equivocados».
¿Alguna vez estuvo en duda? Ciertamente, Kipchoge es el maestro del poker face, sonriendo a través del dolor y haciendo que 2:50min/km parezca relativamente fácil. Pero ir a donde ningún corredor ha estado antes requiere un nivel de fortaleza física y mental más allá de lo imaginable para la mayoría.
Kipchoge lo logró, todo en busca de un sueño. Y fue un privilegio ser testigo de ello: el mejor maratonista de todos los tiempos que demuestra que nada es imposible.